martes, 8 de mayo de 2012

La historia de Ian y Larissa

Apenas vi este video quise compartirlo en este blog esperando que de esta manera pudiera contribuir a que más personas lo llegaron a ver. Espero les sea de bendición.


jueves, 3 de mayo de 2012

¿Qué significa "negarse a sí mismo"?

En una ocasión, nuestro Señor Jesús dijo las siguientes palabras:

Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame. (Mateo 16:24, LBLA)

Jesús estableció que todos aquellos que desean seguirle, deben negarse a sí mismo. Pero, ¿qué significa negarse a sí mismo en el contexto de la vida diaria? ¿Cómo se vive? La siguiente cita de Paul Tripp ejemplifica parte de lo que significa "negarse a sí mismo" en el contexto del matrimonio:

Mientras seamos dos pecadores viviendo en un mundo caído, habrá trabajo que hacer. Algunas veces eso significa estar dispuesto a servir cuando es lo último que quisieras hacer. Algunas veces significa estar dispuesto a escuchar cuando nuestro instinto es argumentar. Algunas veces significa estar dispuesto a amar, aun en aquellos momentos cuando parece que el otro no lo merece. Algunas veces significa humildemente pedir perdón cuando somos tentados a argumentar que estamos bien. Algunas veces significa estar dispuesto a atravesar un momento de tensión con tal de que la verdad sea puesta sobre la mesa. Algunas veces significa estar dispuesto a pasar por alto una ofensa menor.  Pero hay una cosa de la que podemos estar seguros: mientras descansamos en la gracia de Dios, somos llamados a dar gracia el uno al otro.

Paul Tripp. What did you expect? Redeeming the realities of marriage.

Creo que estas palabras de Paul Tripp encarnan la idea de lo que significa negarse a sí mismo en el hermoso contexto del matrimonio. Sin embargo, muchas de las ideas son igualmente aplicables a cualquier otro tipo de relación con el prójimo.


Porque la tierra que bebe la lluvia que muchas veces cae sobre ella, y produce hierba provechosa a aquellos por los cuales es labrada, recibe bendición de Dios. Hebreos 6:7