La vida no vale la pena sin Jesús

Hola:

Les invito a que vean el siguiente video sobre un creyente llamado Roger, que todos los días enfrenta tener que vivir con una condición llamada parálisis cerebral.

Lo que vemos en este video es un poderoso y conmovedor testimonio de la obra que ha tenido el evangelio en alguien que enfrenta duras luchas contra una condición física, que le hace la vida muchísimo más complicada que lo que muchos de nosotros experimentamos diariamente. Nota por favor las siguientes frases:

• Jesús significa todo para mí (minuto 2:53)
• La vida no vale la pena sin Jesús (minuto 3:11)

Estas son declaraciones profundas de fe que, al menos a mí; me producen una fuerte confrontación. 

 

Piensa en todo lo que tienes en la vida, ya sea algo material o no material: casa, auto, empleo, familia, esposa, hijos, etc. Si alguna o varias de éstas te fueran quitadas (piensa en aquello que más amas) ¿creerías aún que la vida vale la pena? ¿En qué estamos basando nuestra felicidad y esperanza?

En México, es común que las personas digan (aún entre los cristianos) una frase parecida a esta: "bueno, pero al menos tenemos salud, que es lo más importante". ¿Has escuchado algo similar? En otras palabras, cuando afirmamos esto, estamos reconociendo que si bien podemos estar pasando por dificultades económicas o familiares, aún podemos seguir agradeciendo a Dios y pensar que vale la pena continuar viviendo porque, al menos, no nos hace falta la salud.

¿Pero que pasaría si vivir significara tener que enfrentar todos los días una condición física dolorosa, extenuante y humillante, como la de Roger? ¿En verdad pensaríamos que la vida vale la pena vivirla? 

 

Sólo podríamos hacerlo, si Jesús en verdad significara TODO para nosotros. Podríamos no tener cosa alguna, NADA, ni familia, ni bienes materiales, ni salud, y como Job, aún adorar al Señor. Sólo cuando nuestro vivir es Cristo, la vida vale la pena vivirla, porque tener a Jesús es tenerlo todo. Entonces el morir también será ganancia, pues signifirá estar con Jesús, aún cuando signifique tener que dejar todo lo que tengamos en este mundo.

Medítalo.
Le pido a Dios que me permita meditarlo mucho más seguido.