jueves, 8 de abril de 2010

Buscad las cosas de arriba.

Si habéis, pues, resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. Colosenses 3:1-2.

Todos sabemos que alrededor de estas fechas, por todas partes encontramos muestras de fervor religioso: la televisión transmite películas de contenido religioso, en numerosos pueblos se hacen peregrinaciones y representaciones de la muerte de Jesús, y las iglesias están saturadas de personas. En estos días parece que todo el mundo tiene puesta su mirada en el Cristo resucitado.

La triste verdad es que para la mayoría de las personas, este interés o fervor no es otra cosa más que parte de una religión muerta. La mayoría de la gente que en estas fechas dice recordar la muerte y resurrección de Jesús, a los pocos días vuelve a su vida cotidiana, en donde no hay la menor evidencia de creer que Cristo está vivo. Las televisoras regresan a su programación habitual, llena de violencia, ocultismo e inmoralidad sexual. En las calles ya no se habla de Jesús, ni se le rinde adoración. Las iglesias vuelven a su ocupación normal, algunas de ellas quedando de nuevo completamente vacías.

En cambio, para el creyente, la resurrección de Jesús es parte de una fe viva. El creyente, continuamente está poniendo su mirada en el Cristo resucitado y exaltado. El creyente en Cristo no celebra y recuerda la resurrección de su Señor sólo una vez al año, sino que constantemente está meditando en ella, y procura entrar en su compañía en la vida de resurrección.

El llamado de la Palabra a nosotros en este día, es a que recordemos, meditemos y vivamos la resurrección, no sólo un día al año. Sino cada semana, cada día, en nuestras relaciones, en nuestras actividades, en nuestros pensamientos, porque “hemos resucitado con Cristo”.


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Porque la tierra que bebe la lluvia que muchas veces cae sobre ella, y produce hierba provechosa a aquellos por los cuales es labrada, recibe bendición de Dios. Hebreos 6:7